Te voy a echar de menos.

Es cierto, lo voy a hacer, de echo ya lo estoy haciendo. Tu sonrisa de malo cuando me intentas hacer enfadar, esa risa tan peculiar que tan solo tu tienes, esas cosas que solo tu sabes hacer para hacerme reír. Esa cara de niño pequeño cuando te picas sin razón, solo para que te ruege que me perdones y nos reconciliemos. Esos besos de vaca que tanto e odiado siempre, pero a decir verdad, ahora los echo de menos. Todas esas noches juntando nuestras camas hablando por teléfono, aun que no tuviésemos tema o hubiésemos estado toda la tarde juntos, daba igual. Todas esas lagrimas que e derramado por ti, como solo tu me sabias hacer reír mientras lloraba y cuando no lo conseguías melas secabas diciendo que era una llorona, pero que estaba guapa hasta llorando. Las coca-colas, una de las pocas cosas que hemos tenido siempre en común, nuestro amor a ellas. Dicen que los polos opuestos se atraen, ese era nuestro caso. Desde ese ultimo beso que te di tengo la necesidad de tenerte cerca, esos ojos verdes que tanto me hipnotizan, esa sonrisa que me vuelve loca, tu. Quiero que vuelvan esos medio días en los que cocinábamos malamente en tu casa, todas esas fiestas en las que as estado tu ahí para animarme. Quiero que vuelvas tu.
¡Joder! Te quiero.